25 de noviembre de 2011

Olor a Alcoholado


        Ese olor tan inconfundible y tan distintivo de seres inmaculados que llamamos abuelas. Hoy fui a verte. Hacia mucho que no te veía. Te extrañaba tanto que no importo todas las responsabilidades académicas pendientes, yo necesitaba ver a mi viejita. Tu pelo gris, surcos en la piel representando cada año de vida, y tus manos tan delicadas que con el paso de los años han cambiado tanto por tu artritis. Cuando te ví mi corazón salto de alegría y recordé cuando me cuidabas de niña. Recuerdo que siempre fue la consentida de todos tus nietos y me gustaba por que siempre tuve privilegios con tu nevera, tus dulces y tus juguitos. Me obligabas a comerlos y admito que los comía porque entendía que sino me obligarías de todas formas.
       Al abrazarte te noté mas delgada. Rápido agarrastes tu pote de alcoholado  y comenzastes a frotar tus piernas. Me comentastes de tu dolor en la rodilla y yo solo disimulaba el mío. Siempre había pensado  que me durarías para siempre pero ahora veo que los años han pasado y me reuso a tu vejez. Aún cuando estaba compartiendo contigo me dolió estar lejos de ti y no poder compartir mas. A través de la vida he comprendido que las abuelas son personas sagradas; son ángeles que Dios nos envía a la Tierra para sentirnos queridos y seguros. Abuela, me haz dado un amor incondicional y hoy te quiero dar gracias. Aunque tu pelo cambie de color, tu expresiones se marquen cada día mas y los años hagan surcos en tu piel, nunca dejarás de ser hermosa para mí. Te amo abuela. Tu belleza y particularidad perdurarán la eternidad.

22 de noviembre de 2011

Mariposas en mi estómago

        De pequeña siempre soñaba con ese príncipe azul que cada película de Disney me enseñó, algún día llegaría a mi vida. Sin embargo, ya han pasado 22 años y durante esta reciente etapa de adolescente adulto o adulto adolescente he sufrido precisamente por la búsqueda de mi caballero, ese príncipe azul que con dinero o sin dinero me rescataría y ya no tendría de que preocuparme. En el transcurso de los años descubrí que las relaciones no duran hora y media y no necesariamente tienen finales felices por siempre. Las relaciones, al igual que los negocios tienen sus altas y sus bajas lo importante es saber sobreponerse. Se debe tener en perspectiva que hay que ser paciente, literalmente, una relación es la unión de dos mundos que por razones a veces incompresibles deciden unirse en matrimonio.
        En Puerto Rico la tasa de divorcios es bastante alta si la llevamos a comparación con la tasa de cincuenta años atrás. ¿A que se debe este incremento? La realidad es que existen muchos factores, desde la tolerancia, las diferencias, lo económico, el abuso y la convivencia. Por otro lado, hace unos días en  mi clase de botánica discutían la importancia de plantas con la capacidad única de reproducción sexual y lo importante que son los polinizadores. La profesora dijo: “Es como el matrimonio… poder hacer cosas que estando solos no podemos”. Las plantas necesitan de los polinizadores para vivir como nosotras necesitamos de ese ser tan especial.
        Hace un tiempo atrás conocí un ser muy especial, reconozco que no es perfecto como las películas me dijeron que debía ser. Admito que si decido esperar por ello tendría que trabajar en Disney y grabar muchas horas para que otras crean como yo,vil mentira. El me hace sentir esas mariposas que hace mucho tiempo no sentía. Me siento especial…siento que levito en vez de caminar. Me he llenado de energía, siento que soy una nueva persona. Contigo he aprendido el poder de una sonrisa, el poder de un te quiero. 

13 de noviembre de 2011

Música. Alma. Sexo


       A solo horas de haber llegado del último concierto de la gira M.A.S. del cantante Ricky Martín sentí la necesidad de hablar de este evento por el que llevaba meses esperando. Al inicio de Agosto el astro boricua decide cerrar su gira en Puerto Rico y recuerdo que compré las taquillas tan pronto supe que volvería a esta hermosa isla. Pasaron los días y justo en la semana de su presentación salió a relucir que el tan famoso artista deseaba la ciudadanía española. Se creo polémica y opiniones muy divididas, entre lo correcto o incorrecto de esta petición.En particular no lo encontré como algo significativo desde el punto en que conozco personas con dos y tres ciudadanías, y créanme que eso no significa que nacemos en dos o tres lugares distintos.
        La realidad es que no le di importancia al asunto. Sin embargo, al cabo de unos días, en una cita médica con mi padre surgió el tan controversial tema. El me preguntó que yo pensaba al respecto, y claro luego de unos segundos dijo: “Metí la pata”. Fue sencillo lo que le dije: “no es lo mismo ciudadanía a natalidad”. Los puertorriqueños tenemos una habilidad increíble a tergiversar las situaciones de una forma inimaginable y lo mas triste de toda esta polémica es que ni siquiera tenemos una ciudadanía propia. No existe una ciudadanía puertorriqueña, solo una simbólica que algunos pocos han solicitado.
        Ser ciudadana americana solo me identifica como habitante de América, un continente diverso, luchador, sufrido y oprimido por naciones que dicen llamarse líderes. Puerto Rico es mi orgullo, es mi isla, en fin es mi pedacito de tierra. La comparto con 4 millones de habitantes y cada día que me acuesto en mi cama pienso que puede haber un mejor mañana. De pequeña cuando tenía mucho miedo a la oscuridad siempre pensaba en lo que me decía mi padre: … “que nunca una noche ha vencido el amanecer y nunca un problema ha vencido la esperanza”. Anoche Ricky recargó las baterías de todos los que allí presentes vivimos el poder de la música. La música purifica el alma y nos hace LIBRES.



10 de noviembre de 2011

Aeropuerto


       Eran las 6:34 p.m. cuando llegue al estacionamiento donde me encontraría contigo. Pasaron unos minutos en lo que pude ver tu carro entre muchos otros que aguardaban por el cambio de luz. Me baje de mi auto y me dirigí hacia el tuyo. Con un poco vergüenza me asome por la esquina a ver si lograbas verme. Estuve muy pendiente de tu expresión; tu sonrisa me demostró que te agradaba lo que veías. Me recibisteis con un “te ves hermosa” y de inmediato sentí todas esas mariposas que mágicamente aparecen en el estómago cuando sientes mucha empatía por ese ser tan especial. Como siempre, nunca sabemos donde comer así que decidí yo: ¡Quiero Pizza!

       Llegamos a una pizzería donde comimos una rica y excelente comida. Luego de comer decidimos ver aviones e irónicamente estábamos muy cerca de un aeropuerto así que allí, bajo la luz de la luna, algunos carros estacionados, otros en movimiento y la luz de la pista, nos estacionamos. Bajamos las ventanas y de fondo teníamos el radio tocando música de jazz  y un poco de tango. Hablamos hasta cansarnos y de repente tus labios rozaron los míos. En cada beso podía sentir chispas saliendo de nuestros labios. 
Literalmente sentía una poesía de emociones donde cada beso representaba un verso de amor, cariño y ternura. Me imaginé un sin fin de momentos a tu lado e incluso recuerdo que te comente que deseaba plasmar este recuerdo y duradero. El atardecer fue reemplazado por cientos de puntitos que marcaban el camino correcto al próximo avión por aterrizar. Los minutos pasaban y lo único que opacaba mi felicidad era que este momento no sería eterno. Pronto debía volver a una normalidad no deseada donde tendría que esperar hasta la próxima semana para verte. 
       Dentro de toda la infelicidad que esto podría causarme, me reconfortaba el hecho de que podría llegar a casa y escribir todo aquello que sentí. Aquí traté de mostrarles un poco de todo el amor que sentí esa noche de domingo. El esperar la llegada de cada avión me devolvió la esperanza de que nunca es demasiado tarde ni demasiado temprano para retomar el camino correcto. 
 “No vale el tiempo, pero valen las memorias. No se cuentan los segundos, se cuentan las historias.” - C13




8 de noviembre de 2011

¿Por qué el parabrisas es más grande que el retrovisor?


Eran las 4:50pm de una tarde de domingo. La luz cambio de un color amarillo intenso y marco ese tan marcado rojo que indica detente y piensa. Pasaron unos segundos antes que un carro se detuviera detrás. Como siempre he tenido mucha curiosidad, mire por mi retrovisor y allí estabas; mi pasado. Te observé por poco menos de un minuto. Con el paso de cada segundo llegaban recuerdos desde ese primer día que te vi. Recuerdo que teníamos unos 14 años cuando mis ojos se cruzaron con los tuyos. Cursábamos el octavo grado y siempre te encontré muy tierno, de hecho siempre me gustasteis pero nunca tuve el valor de decirlo. Luego de dos años, cuando apareció ella fue que tuve el valor de admitirlo; pero ya para este entonces fue demasiado tarde. Descubrí que estaban hechos el uno para el otro, te convertisteis como ella o ella se convirtió en lo que eres. Un ser muy hermoso pero vacío. 
        Han pasado los años, pero ellos no han pasado por ti. Sin embargo ya no tienes ese pelo largo y ahora estos se han mudado a tus mejillas y parte de tu cara. Te ves muy serio y hasta podría llegar a confundirme y pensar que la Universidad te ha vuelto un tanto intelectual. Sin embargo, se que no es así. En fin, cada cual continuo su camino y aquí nada paso. Solo recuerdos fugaces que he aprendido que mas que torturarnos, nos recuerdan que cada acción tiene una respuesta. Este evento tan significativo me recordó una frase que una vez leí en un lugar que  aún no logro precisar: “¿Por qué el parabrisas es más grande que el retrovisor? Porque lo que viene adelante es mas importante que lo que ha quedado atrás”.